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Tarjeta blanca en el fútbol: qué es y para qué sirve

Fue mostrada por primera vez el pasado fin de semana en la Copa Portuguesa femenina. A continuación, los detalles de esta nueva herramienta para los árbitros

Por Redacción

24 de enero, 2023 - 17:06

"El futuro llegó hace rato", dice una canción de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota. Y está claro que mientras más va avanzando el mundo, nos tenemos que ir adaptando a los nuevos cambios. Y el deporte no se queda atrás, ya que siempre se intenta mejorar, de alguna u otra manera, las acciones de juego. 

En este caso es el fútbol quien decidió colocar una tarjeta más, además de la amarilla y la roja. Se trata de la famosa tarjeta blanca. Pero, ¿para qué es y en qué ocasiones se utiliza?

Lo cierto es que esta nueva cartulina que tendrán los encargados de impartir justicia, busca generar conciencia en el deporte y destacar las actitudes de juego limpio o fair play, o bien "mejorar el valor ético en el deporte”, según lo indicado por FIFA.

El primer paso

La jueza Catarina Branco fue la primera en sacar la tarjeta blanca en un partido profesional. Con la presencia de más de 15 mil personas en el Estadio Da Luz, se enfrentaron el pasado domingo Benfica y Sporting Lisboa por la Copa Portuguesa de fútbol femenino, que terminó con una contundente victoria por 5-0 para el conjunto local.

Sin embargo, el suceso histórico se dio a los 44 minutos de la primera parte cuando Branco decidió sacarle la tarjeta blanca a los cuerpos médicos de ambos equipos, luego de que estos asistieran a un hincha que se encontraba en una de las tribunas y necesitó de una rápida intervención médica.

La jueza no dudó un segundo y decidió mostrar por primera vez en la historia esta tarjeta, y por supuesto, el gesto de Catarina se llevó los aplausos de los presentes en el Estadio del Benfica. 

La historia de las tarjetas amarillas y rojas

Las tarjetas de colores se empezaron a implementar desde el Mundial de México 1970. Es que cuatro años antes, en la Copa del Mundo de Inglaterra 1966, el local y Argentina, protagonizaron un hecho que generó la necesidad de más herramientas para los árbitros. 

El hecho fue cuando el jugador argentino Antonio Rattín no se quería ir de la cancha. El árbitro alemán, Rudolf Kreitlein, expulsó al exfutbolista de Boca, pero éste no se quería ir (en el medio de un arbitraje muy polémico y localista), asegurando no entender qué le decía el juez, que claramente no sabía hablar español. Este antecedente obligó a la FIFA a tomar una drástica decisión y aquí es donde nacen las tarjetas. Un lenguaje universal, no solamente para los futbolistas, sino para todos los presentes en el estadio.