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El adiós a un gran goleador: Andrés Molina

El fútbol mendocino nuevamente de luto por la desaparición del exquisito delantero que brilló en Argentino, la Lepra, el Lobo y el Tomba en los años 70

24 de febrero, 2021 - 18:38

Era un grande de la Academia de San José y el fútbol mendocino: Andrés Ángel Molina. Aquel toro que arreaba defensas y hacía enrojecer las gargantas de la gradería albiceleste con sus incomparables goles, falleció ayer.

Un exquisito que arrancó como volante, hasta que el legendario entrenador Abel Sklate le encontró la posición exacta en la cancha. De 10 pasó a ser 9 y con ello explotó sus virtudes: guapeza, habilidad, buen pie para la devolución, gran cabezazo y gol. Sus goles lo erigieron en un insustituible en el Argentino de los años 70.

Equipos que salían de memoria, porque llevaban varias temporadas juntos. Una delas más recordadas era la de aquella Academia que formaba de esta manera: Ugliardi; el Ñato Ruiz, Marlia, Pacheco y el Repollo García; Picho Fernández, Zolorza y el Flaco Suárez; Milton Levalle, Andrés Molina y Rodofo Elías Herrera.

Con la que llegaron a la final (perdida) ante Huracán de Comodoro Rivadavia por un cupo en el Torneo Nacional. Andrés fue uno de los grandes talentos del semillero que cultivaban don José Ruarte, don Quito Pacheco y el gran Aroldo Cortenova.

En 1976 sus goles lo llevaron al poderoso Talleres de Córdoba, en donde jugó dos partidos. Más que por lo futbolístico, Andrés recordaba su paso por la T por ser uno de los privilegiados que vio el debut en Primera de un tal Diego Maradona en un Argentinos Juniors- Talleres. "Hoy va a estar en el banco ese pibe que hacía piruetas en el programa de Pipo Mancera.

Si entra lo agarran y le dicen: 'pendejo, andá a hacer boludeces a la televisión'", fue el mensaje que les dio el entrenador tallarín Rubén Bravo y que Andrés recordaba siempre entre risas. “No tenía idea de quien iba a ser ese pibe”, cerraba la anécdota Andrés.

En su retorno a Mendoza, Molina jugó el Nacional del 77 para Independiente Rivadavia en donde actuó en 13 partidos y marcó 4 goles. Un gran equipo en el que compartió plantel con Montilla, Mémoli, Vergara, Spitalieri, Millán; Monárdez, Zolorza, Cabrero, Pichula Funes, Febre, Cúper, Lalo Bazan, Miguel Villegas, Luis Ruiz, el Puma Molina, Velázquez, dirigidos por el Cholo Converti.

Luego de ese aceptable Nacional para la Lepra, volvió a Argentino y formó parte de aquel  famoso amistoso entre la Academia contra la Selección de Holanda que se preparaba para el Mundial del 78 y finalizó 9 a 1 a favor de los tulipanes. Molina marcó el gol para los mendocinos. Ese mismo año se sumó a Gimnasia para el Torneo Nacional.

Fernando Montaña, Piero Pérez Prolongo, Alfredo Quique Lucero y Andrés Molina

Cerró su carrera en Godoy Cruz en 1981 luego de una lesión en la rodilla.Fuera de su etapa de jugador, Andrés Molina siguió vinculado a la Academia como simpatizante y también para participar de los distintos homenajes a las glorias del club

.Una afección que lo tenía a maltraer desde hace un par de años y por la cual estuvo internado varias veces y la reciente desaparición de su esposa de toda la vida minaron su salud. Ayer por la mañana el gran Andrés Molina, ese “distinto” que dio el fútbol mendocino setentista se fue a los 64.

Una enorme tristeza.