Con un polémico arbitraje, la Lepra cayó en Tucumán

Independiente Rivadavia no pudo hilvanar su segunda victoria consecutiva al caer por 2 a 0 frente a San Martín de Tucumán en La Ciudadela. El Azul volvió a poner de manifiesto la irregularidad que lo ha caracterizado en esta temporada. Sin embargo, la victoria del Ciruja se vio cuestionada por el arbitraje de Lucas Comesaña. 

El equipo local casi se pone en ventaja los 8 minutos del primer tiempo, cuando Leandro Finochietto intervino ante una arremetida de Juan Miritello, quien había recibido un pase del enganche Santo, Valentín Larralde. A los 19' el juez Lucas Comesaña quien luego fue poco equitativo en el uso de las tarjetas, vio una mano del defensor Felipe Scolari adentro del área de la Lepra. El reclamo de los hombres de Independiente fue que la mano habría sido afuera.  Penal que Tino Costa transformó en la apertura del marcador para los tucumanos.

Con el 0-1, El Comandante Gómez movió el banco y con los ingresos de Galván y Ramos, Independiente llevó el partido hasta el campo del local.  Eso sí, Matías Quiroga no anduvo derecho para el arco y allí estuvo otra de las claves del partido, mientras San Martín tuvo gol, la Lepra no.

El polémico Comesaña le perdonaba la expulsión a Orellana, quien había detenido con una descalificadora entrada a Ramos y todo se repetía en centros para Quiroga, que como apuntamos no anduvo bien en su mejor cuerda, la de la definición.

Gómez agotó los cambios para intentar empatarlo, pero no alcanzó a comprobarse el resultado de su movimiento técnico. Los tucumanos recuperaron una pelota en la salida de la Lepra y tras la cesión a la izquierda, Diego Sosa puso el 2-0.

Antes del final, Quiroga, que se había perdido el descuento, fue expulsado por una jugada brusca. Lo objetable es que su primera falta no merecía amarilla. Independiente volverá a jugar el próximo lunes (18 de abril) frente a Defensores de Belgrano en el Bautista Gargantini