Consumo en crisis

Los rechazos de tarjetas de crédito preocupan al sector comercial

Salvador Femenía, vocero de la CAME, en diálogo con Círculo Político, expresó su profunda preocupación por la caída de las ventas minoristas.

Redacción

Por Redacción

9 Septiembre de 2024 - 22:01

En un contexto económico cada vez más desafiante, las ventas en Argentina han experimentado una caída significativa, agravada por el aumento de los rechazos de tarjetas de crédito debido a la falta de límite. Salvador Femenía, vocero de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), en diálogo con Círculo Político, (lunes a viernes de 14 a 16 por FM 91.7 Ciudadano News), expresó su profunda preocupación por esta situación.

Salvador Femenía, vocero de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

"Preocupa mucho porque no solamente es esta caída de agosto, sino que esto se viene repitiendo sistemáticamente desde diciembre del año pasado, mucho más atenuado, tuvimos una situación de baja desde julio de 2022, siempre fueron bajas comparadas en forma interanual. Después de que se inició el ajuste fue mucho más drástico, con caídas interanuales muy fuertes y que se siguen manteniendo, con lo cual la preocupación que nos causa no es solamente la caída por el recorrido que tienen durante este año, sino es la persistencia y la falta de una perspectiva clara de cuándo se va a producir el punto de inflexión sobre todo en nuestro sector. Hay algunos sectores que manifiestan que ya han tocado piso y que están lentamente comenzando a crecer, en nuestro sector todavía no lo vemos", afirmó Femenía.

La indumentaria y los electrodomésticos, los más afectados

El sector de la indumentaria es uno de los más golpeados por esta crisis. "La indumentaria es un caso muy especial en Argentina porque es cara siempre, independientemente del tipo de cambio, siempre somos caros en la ropa. Pero, en general, no estamos viendo una diferencia en el tipo de cambio que hace que seamos caros y la gente que tiene posibilidades cruza del otro y va a comprar a Chile y creo que electrodomésticos también. 

Es una situación desventajosa, se ha dado vuelta la situación respecto a lo que fue el año pasado que era al revés, los chilenos venían a comprar a Argentina, pero evidentemente que hay un problema con el tipo de cambio, si Argentina tuviera una presión impositiva consolidada equiparable a Chile seguramente la diferencia no sería tan grande como está ahora, tenemos impuestos que gravan mucho el consumo, el precio final en algunos productos tienen casi un 50% de impuestos, entonces, eso no nos hace competitivos y ahora que se expone más porque no hay un proceso inflacionario como el que hubo se nota más la diferencia en la micro", explicó Femenía.

La presión impositiva y la informalidad, un círculo vicioso

La elevada presión impositiva es otro factor que contribuye a la crisis del comercio. "La economía debería funcionar de otra manera, es muy nociva la presión impositiva que hay y evidentemente el comerciante inclusive ahora un poquito más acentuado porque cuando se ofrece descuento en efectivo esa operación no se formaliza, se toma este camino para poder cerrar el número y seguir subsistiendo, si la AFIP saliera a la calle a buscar toda la gente que trabaja en negro creo que no quedaría nadie en pie", señaló Femenía.

Reducción de jornada laboral, una medida de emergencia

En varias provincias, la reducción de la jornada laboral se ha convertido en una medida de emergencia para enfrentar la crisis. Aunque no es la solución ideal, muchos empresarios y dueños de negocios han optado por esta estrategia para poder subsistir en un entorno económico adverso. "Sí, esto se ha transformado en una herramienta porque no es solamente para poder cerrar el número ni para seguir subsistiendo sino para no tomar la decisión de despedir, que es un rasgo bastante que tiene la empresa pyme que trata de siempre con la esperanza de poder salir adelante no despedir gente porque hay una relación muy diferente, para hay un proceso de formación y de inversión en tiempo dinero para capacitar a la persona que tiene como colaboradora. Hay reducción, puede haber suspensiones pero como un caso para no tener que despedir gente independientemente de que continúe o no el negocio", agregó Femenía.

El rechazo de tarjetas de crédito, un problema creciente

La falta de límite en las tarjetas de crédito ha llevado a un aumento en los rechazos, afectando gravemente el consumo. "Es así, es un proceso casi lógico, un efecto no deseado como una consecuencia de este camino de ajuste que estamos transitando, la gente para poder consumir y mayoría de los casos comprar para manutención recurre hasta para comprar los alimentos del hogar en hasta tres cuotas, pero eso es pan para hoy y hambre para mañana porque al mes siguiente tenés que repetir la compra y ya tenés una deuda del mes anterior y sucesivamente y esto va colmando las capacidades de los límites de las tarjetas y obviamente, como viene ocurriendo desde hace varios años los bancos no actualizan automáticamente los límites, primero, porque la gente no puede demostrar que tiene más ingresos para pedir un límite más alto y aparte porque los bancos se cuidan para no incurrir en morosidad", explicó Femenía.

"Dentro de los rubros que más cayeron, dos son muy sensibles, farmacia y alimentos, nosotros estamos viendo que el gobierno no negociará los objetivos que tienen de mantener el equilibrio fiscal con baja de inflación, con lo cual no podemos esperar un incentivo fuerte para el consumo, se ha perdido poder adquisitivo y, si no se recupera ese poder de compra, no tendremos mayor consumo y el menor determinará menor demanda para la industria. 

Esto da la pauta que será muy paulatino y de acá a fin de año en las mediciones interanuales van a seguir estando bajo porque el año pasado a esta altura del año había un incentivo al consumo y una actitud de la gente ya con las PASO conocidas y en el transcurso de las elecciones donde se stockeó por las dudas, y ese stock todavía no se terminó, pasa lo mismo con los comercios y la industria después no tiene demanda", concluyó Femenía.

El rubro farmacia es uno de los que más ha sufrido la caída.

La situación económica en Argentina sigue siendo incierta, y la falta de una perspectiva clara sobre cuándo se producirá un punto de inflexión mantiene en vilo a comerciantes y consumidores por igual.